El Jesús revolucionario:
Lo particular de la historia, es que es imposible referirse a ella como singular ya que nunca se puede encontrar una sola historia, siempre surgen diferentes puntos de vista de un mismo suceso, historias sujetas a los condicionamientos de quienes las cuentan, sus capacidad de captar a través de los sentidos esos sucesos presentes que en un instante se hacen pasado y cuya recopilación posterior dará como resultado la “historia “.
Esta es la historia, que si bien esta escrita, parece que lo hicieron en letra chiquita, la de un Jesús militante y revolucionario, sobre las creencias y el manto de divinidad que acobija a este sujeto no me voy a poner a hablar, de esa historia y nada más que de esa historia se han encargado de hablar los papas, curas, pastores , el sin fin de “elegidos” que desde la comodidad de su hogar hoy creen tener la potestad de criticar a un mundo en el que sus acciones son más pobres que sus propias ideas. Se puede decir que no voy a hablar del Cristo si no de Jesús, del ser humano, ese tipo que con solo un par de sandalias, una túnica y la palabra sacudió una estructura apoyada en los pilares de la ambición detrás de las pasiones, el egoísmo, de la idolatracion del poder, el negocio con la creencia y la fe, la tergiversación de la filosofías en beneficio de unos pocos.
Las historias del Jesús que curaba enfermos, dejaba ver la luz a ciegos, que podía revivir a un muerto no hacen más que mitificar al sujeto, y lo coloca en un peldaño en el que el solo hecho de tratar de imitarlo se vuelve un sacrilegio, el Jesús que camina sobre el agua se vuelve fantástico en el mismo momento que intentamos pararnos sobre el rio, y si alguno de esos “elegidos” como siempre quiere tomar la palabra y decirnos que no podemos caminar sobre el agua por una cuestión de “fe”, podremos retrucar que los difundidores de la palabra no han hecho bien su tarea a la hora de devolverle la “fe” al pueblo, por eso nadie se anima, por eso nadie critica las injusticias que las conductas de los hombres segados por el sistema produce en esta vida, (que es nuestro ignorado paraíso). Nos resulta más familiar el hombre que entro a galilea y no pudo controlar su bronca por ver a un par de buitres sentados haciendo negocios con sus propios hermanos, buitres que convirtieron lo que para muchos es un lugar sagrado en una vulgar cueva de ladrones, ese Jesús que venció a sus miedos y enfrento mano a mano al sistema sonrojando hasta al mas soberbio, dejando en claro de qué lado estaba, mostrado en su cuadro al pueblo de fondo, y así le fue! ya todos conocen la historia, lo masacraron sin piedad y una vez en la cruz lo peinaron y maquillaron para la foto, esa que nos están mostrando todo el tiempo para recordarnos lo que le pasa al que piensa diferente , al que ya no quiere ser el muñequito en la parte trasera del auto cabeceando sin cuestionar las palabras de esos pocos que están sentados, resguardados ahora para que ningún hombre de pelo largo entre con violencia a darles vuelta la mesa donde tienen contadas sus miserias, esas que ganaron a costas del sufrimiento de muchos. Es la cruz es el símbolo de la censura extrema, un símbolo terrorista que nos recuerda cuanto sufrió un hombre que asumió la responsabilidad de vivir, de pensar diferente a esos pocos que con violencia tomaron las riendas del carruaje de esta vida, es la cruz donde murió el hombre que tenía un ideal y lo siguió hasta su propia muerte, son pocos los que tienen la imagen del revolucionario que andaba caminando y mostrando al pueblo un mundo diferente, y es por eso que hoy nadie cuestiona nada, nadie cuestiona las conductas de los hombre , es por eso que los religiosos del cristianismo se preocupan por construir un templo para librarse de la realidad que como cristianos deberían estar cambiando, nadie nos va ayudar a cambiar si no lo hacemos nosotros mismos, pero todos esperamos a mesías, a marcianos o algo que cambie el rumbo de nuestro camino , ignorando que lo que no nos deja decir lo que pensamos o contar lo que hacemos, son los miedos. Justamente esos miedos que la sombra de la cruz instala en nuestras mentes, el cristiano al nombrarse como tal está cometiendo un sacrilegio si lo único que hace es hablar de un libro y no se baja nunca de el altar (que construyo para sí mismo) para ir a la sociedad a ver qué le pasa a este mundo que ya nadie quiere ser feliz (en el más puro sentido de la palabra) y todos quieren un poco mas de algo que ya tiene el otro. Pero no!! Están ahí sentados diciendo que está bien y que está mal, si fuera por ellos no existirían los preservativos, esa lucha ganada fue de revolucionarios que vencieron sus miedos y con la palabra lograron enfrentar a las ideas del poder establecido, si fuera por ellos quienes quieren amar a alguien de su género estarían en un sótano, pregunta retorica a vos militante de la vida, ¿ Crees que ese tipo loco de pelo largo, que perdono a quienes lo masacraron, estaría caminando en una marcha no violenta del pueblo, ¿o estaría sentado atrás de un escritorio diciendo que está bien o que está mal? , ¿Que pensaría ese Jesús si entrara al vaticano y empezara a ver lo lujos de ese templo? O ¿que diría si viera al papa moverse en un carrito entre laberintos de personas que lo aplauden sin saber bien porque?
¿Que pensaría si viera las injusticias de este mundo? Y que muchos usan su nombre como escudo para esconder sus miserias, que pensaría si nos viera tan dormidos y con tanto por cambiar? lo sé , cada cual con su ideal pero también sé que si pudiste construir una buena persona en el cuerpo que te dio esta vida serás un militante más que piensa distinto y tenes que luchar contra tus miedos para liberarte, para cortar la mordaza de trapos viejos y balbucear algo por lo menos, siempre con la humildad militante de la vida , siempre dejar hablar primero para después acotar, siempre con la idea fija del bienestar general, para poder mostrarles a esos que dicen que saben, cómo es la vida en realidad. creo que la revolución debe ser en nuestra conducta, en la esencia de lo que somos , no creo que otro sistema escrito en teoría pueda cambiar las cosas, no deberíamos vivir en un mundo donde dos más dos son cuatro si realmente fuéramos sensibles, son los miedos los que reprimen nuestro arte, lo que somos, lo que nos llena, y también son estos los que llenan el vacío que deja el final de un día en el cual hacemos más para los otros o para nuestra imagen, que para lo que somos en esencia.
Cuando nos sentemos a explorarnos por dentro y entendernos como individuos podremos recién entender al “todo”, entender eso profundo que nos hace a todos iguales, y construir una política que nos dé la posibilidad y el tiempo para ser felices sin que nos cueste tanto, solo si entendemos lo símiles que somos por dentro podremos luchar contra las conjeturas superficiales que no hacen más que separarnos y ponernos de un lado u otro de una guerra sin sentido, una guerra vergonzosa que incluso se palpa en las discusiones políticas cotidianas, en las cuales luchamos contra la propia soberbia para tratar de ponernos en la postura del otro, de ahí la necesidad de explorarnos y encontrar la humildad en nuestro “ser” a la hora de militar, y desde esta humildad poder reconocer que es tan delgada que se pierde en el fondo esa línea que separa nuestro camino correcto de la ambición, y que se puede estar perjudicando a otros con nuestro accionar, si no se despiertan los sentidos internos jamás podremos reconocer cuando una elección nos encamina a nuestra utopía o cuando hacia los deseos de unos pocos que suelen tener en el bolsillo interno de su saco espejos de colores para encandilar nuestra honesta visión de la vida. Si te encontraste a vos mismo militante de la vida y rescataste esos valores que los miedos se han encargado de crucificar, podrás salir a la vida con la frente en alto por ser una buena persona y velar así por los vivos de este paraíso, nunca bajes los brazos en la lucha contra los miedos, no se puede reprimir una idea que surge en tu cabeza es tu responsabilidad sacarla al mundo, es tu responsabilidad ayudar a otros a vencer los miedos, es tu responsabilidad HACER en el presente para que otros recopilen tu historia, es tu responsabilidad cortar los alambrados que mesuran las capacidades de nuestra mente , es tu responsabilidad mostrar al ignorante que la ignorancia no es más que el resultado de los intereses desalmados de unos pocos, que no pudieron distinguir esa línea delgada que nos separa del carril de la ambición,¿ cómo se puede juzgar a un ciego por hacer caer un jarrón? ¿Acaso nuestra lucha no debe ser con eso que es interno y nos pone ciegos? Y si esos ciegos no quieren ver, que vean los que todavía no han cerrado las puerta de su inteligencia, de apoco perecerán las culturas que hoy causan sufrimiento sin tener que derramar sangre, no seas pacifico a la hora de obrar pero tampoco seas violento, la violencia, la política saboteadora es la herramienta de los ineptos, podremos extirpar las ideas inverosímiles arraigadas en el sentido común, insistiendo, siendo perseverantes en nuestro actuar sin agredir a otro, sin rebajarnos a la estupidez de querer gritar algo para que todos los escuchen, debemos entender que las verdades llegan a todos aunque se susurren, tardan pero llegan, hacernos creer que el reloj de arena esta escupiendo sus últimos granos es parte del show del miedo que no nos da pausa, queda mucho tiempo por delante y mucho por cambiar, no comparto la violencia como medio de acción, si algo he de criticar del revolucionario Jesús fue esa acción de enojarse, pero ¿quien soy yo para criticar, si en realidad algunas injusticias a mi mismo me enojan mucho? Y ¿quién soy yo para reprimir mis ganas de opinar sobre un tema que puede incomodar algunos?, si, tal vez Jesús se equivoco al darles vuelta la mesa y desparramar las monedas de esos hombres confundidos de la vida, después de todo es de humanos equivocarse, y si en esta vida logras vencer los miedos y la osadía de ser te lleva a agotar tus últimas fuerzas , podrás mirar al rostro de la muerte con la tranquilidad de un hombre libre, porque primero muere el hombre pero después mucho tiempo después, sus utopías.
Siempre con la humildad militante de la vida, revolucionarios saludos.
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